Necesito tu alma.

Eso es.
Soy una estúpida
Me dejé llevar por otras cosas.
¿Eres tú?
¿Por qué es que tengo esta necesidad de saber de ti, de que estés bien?
Dejo que me afectes:
Si estás bien estoy bien.
Me adjudico tu felicidad,
Siento que soy responsable de tus bienestares.
Pero te dejé ir.
Dicen que huí por miedo.
Quizá así fue.
No puedo mentir,
Sentí algo,
Esa chispa en nuestros labios
En el último beso.
No fue tan fuerte como tú lo sentiste,
Pero lo sentí.
Quizá fue miedo…
Nos tuvimos entre nuestros brazos,
No puedo olvidarlo,
Y eso me confunde.
Odio admitirlo ahora.
Cuando fui yo la que te juró que no quería nada más,
Pero entonces, ¿por qué está necesidad de estar aferrada a la computadora para ver si puedo platicar contigo?
Si estás mal, me siento fatal,
Me atribuyo tus malestares.
Con nadie más, mi sonrisa es sincera,
Con nadie más puede llorar mi corazón…
¿Ahora puedes sentir mi dolor?
Odio la confusión
¿Qué es lo que me pasa?
Tenía miedo de lastimarte,
De que no pudiera sentir más.
Mi corazón es lento
Y me dejé llevar por otros.
¡Qué tonta estoy!
No importa lo que ella diga,
Yo estoy bien,
Porque con él nunca podré estar,
Es solo pasajero,
Pero tú, tú alma es bella
Un alma que me entiende,
Puedo verla en tu mirada, en tu sonrisa franca,
La siento cuando me hace sonreír de verdad.
Y entonces, ¿qué fue lo que me pasó?
¿por qué necesito abrazarte, ver tus ojos?
No es más que puro narcisismo,
Qué egocéntrica,
Necesito ser adorada,
Pero el miedo vuelve,
No puedo adorarte yo,
Así no es cómo funciona,
El amor es reciproco
Y a veces temo que no pueda amarte para siempre
Como prometes tú.
Sentía tu ser entre mis manos,
Podía destruirte o salvarte
Y decidí soltarte,
Que cayeras y te levantaras por tu cuenta.
No quería ser un asesino, ni un salvador.

Los humanos solemos medir todo,
Todo lo tenemos en cantidades, porciones.
Medimos las distancias,
La comida,
El tiempo,
Incluso el amor…
Y lo hice,
Comparé en cantidades nuestro amor.
Tú me amabas
Y yo, yo tengo esa necesidad,
Pero no es más que una necesidad.
Te quiero
Es cierto,
Te deseo todos los bienes del mundo.
Dejé que mi felicidad dependiera un poco de ti,
Pero no es más que necesidad…
Y entonces, esta confusión.
No nos veo del todo juntos en un futuro,
Y, ¿por qué, entonces, dependo de ti?
¿Qué es lo que necesito de ti?
Necesito tu alma,
Estoy bastante encariñada con tu alma,
Sé que puedo lastimarte o curarte,
Necesito saber que todo esta bien,
Amo tu alma,
Aunque a veces se afecta por el cuerpo,
Pero es casi un alma pura.
Aun recuerdo esa última mirada,
La mirada de un alma destrozada,
Y me da un vuelco el corazón…

Y entonces, ¿Qué haré ahora?
No puedo jugar contigo,
No puedo pedirte nada,
Suficiente he hecho ya.
Quizá el tiempo lo dirá.
Tenemos que continuar.
Quizá en poco tiempo alguien más nos llegará
Y nos reiremos de nosotros ahora…